jueves, 6 de diciembre de 2012

¿Algo más que decir?



Radical, sí, pero nunca inhumano.

¿Malhumarado? Depende de tu tabla de fórmulas. Si tomas en cuanta el promedio del humor que toma la gente ante sus tragedias cotidianas, encontrarás que por comparación y suposición, soy una persona de un agraciado e inigualable buen temperamento.

¿Necio? No podría ser de otro modo ante tanta insistencia de la estupidez a mi alrededor.

¿Idealista?  Depende, he encontrado que gran parte de las sociedades más avanzadas son tan necias como un hombre exitoso ya formado: no hay modo de hacerle ver que hay otras maneras de pensar. Ahí me declaro de si lu sio na do. Si me hablas de un pueblo destruido, entonces ahí hay esperanza de enseñarles a ser abiertos, incluso cuando después logren ser exitosos. Lo mismo es con la gente.

¿El amor de tu vida? No hay que perder el tiempo con cosas que si pasan, van a pasar, y si no van a pasar, no pasarán, haga uno lo que haga.

¿Futuro? Lo mismo que el pasado. Tan relevante era que sucediera, que a nadie le importaba lo que pasa en ese momento, pero todos creen lo contrario.

¿Amistad? Usaré un lugar común transformado. Soy amigo de la amistad misma. Los amigos. Eso es una necedad más de la idiotez que anhela lo incondicional y teme a la decepción.

¿Familia? Parecida a la amistad, excepto que la familia y el amor no son sentimientos que visten de diferentes personas. Son una idea que rescata y prevalece cuando las desgracias se ponen de acuerdo para darte donde más padeces.

¿Consejos? No hacer lo que uno no quiere. Y si uno no quiere ser libre, no dejes que te obliguen a serlo.

¿Conocimiento? El conocimiento se debe apreciar como cualquier otro objeto ridículo que apreciamos. Sabemos que ante los ojos de los demás o ante el fin del mundo o ante las peores circunstancias, de nada sirve, pero cómo nos gusta tenerlo. Es caro, lujoso y nunca pasa de moda con uno mismo. No podría decir lo mismo de un barato, austero y muchas veces aburrido Ferrari.

¿Creer en el hombre? ¿A quién o en qué nos sirve no creer en él?

¿Perdonar? No hacerlo es un lujo muy engorroso como para no contarlo hacia con nosotros mismos, para nosotros o de parte de los demás.

¿Suicidio? Pocas cosas nos provocan tanta envidia.

¿Hijos? Si no son para echarlos a perder y hacerlos infelices, no sé para qué podría alguien tenerlos.

¿Algo más que te gustaría decir? Siempre… siempre.  

martes, 20 de noviembre de 2012

Cómo salvar al mundo con el mínimo esfuerzo



¡Pero  la masacre de Palestina! Ve esas fotos tan horribles de los niños muertos. Y aunque haya a quien no le gusten o le incomoden, no podemos dejar que le dé la espalda a esta desgracia… Mira, el otro día salió Pedro a cuestionarme que por qué no había puesto la misma atención a las fotos de los niños obreros en China, ¡pero claro que les puse atención!, de hecho yo misma las compartí y hasta le expliqué a todos que no debían de ser indiferentes a la miseria china. Pero eso fue como la semana pasada, y el impacto de las fotos de los niños palestinos es muy diferente. O sea, yo ya hice mi parte por China, a mí es a la que menos puedes decirle.  Y no me vengas con excusas, aquí no importa si no sabes qué está pasando, ni por qué está pasando, ni mucho menos si no sabes dónde está pasando. Por ejemplo yo, que antes no sabía dónde estaba Palestina, no me importó. Porque basta ver las fotos para conmoverse. Quiero decir, quién necesita documentarse, ¿sabes? Una foto dice más que mil palabras. Porque yo veo una imagen y de inmediato reacciono. No sé, así siempre he sido yo. Y perdóname que te lo diga, pero no sé cómo puedes seguir viviendo como si nada después de conocer semejante tragedia. Y te voy a ser franca: si no condenas de inmediato esta situación, pues la estás promoviendo; ya te dije, no sé por qué dices que necesitas leer al respecto, aquí no se trata de informarse, se trata de defender la vida por la vida misma, sobre todo a los niños, y si tú viste las fotos y no lo condenaste pues es porque lo estás apoyando, no es cosa de leer. Nada de dudas. Por ejemplo, yo qué me voy a estar preguntando si un día van a curar el cáncer o no; o sea, yo apoyo el día ese que exactamente no recuerdo qué día es, pero que es el día de la lucha contra el cáncer. Yo me pongo mi moño y hasta le pongo uno a cada una de mis hijas, para que vean que nosotras sí apoyamos. Obvio yo sé que hay cosas por hacer, que de voluntariado, donaciones y esas cosas, pero pues yo por eso le informo a la gente con mi listón, un chorro de cosas que se tienen que hacer. También es cierto que no se puede estar en todo, como el otro día que mi cuñada me estaba diciendo de una marcha por la democracia o los derechos de no sé qué, y quería que la acompañara, pero pues la verdad yo no tenía tiempo, y para serte honesta la verdad ni supe bien cómo estaba eso de la marcha y mejor no fui. O sea, yo tampoco me voy a prestar a esos juegos. Al rato van a querer que todo el tiempo esté haciendo y tenga presentes no sé qué tantas cosas. Como te digo: hay límites. Y a propósito de democracia, ¿si te enteraste de lo que pasó en Egipto, eso de la primavera árabe y toda la cosa? ¿No? Ay, pero cómo, si yo lo puse en mi face. A la otra hasta te voy a etiquetar porque está interesantísimo. A mí me lo pasó una amiga y en cuanto me dijo lo compartí. La verdad es algo en lo que yo coincido mucho, algo que se debe defender, eso de la democracia en Egipto.  Aunque cómo hay gente que se aprovecha de la buena voluntad de uno, porque no te creas, también me han tocado malas experiencias. Como esa vez que anduve difundiendo lo de un dictador de África, creo, que era muy malo, así un tirano mal plan, y que hasta un video le hicieron. Keny, creo que se llamaba Keny. Y pues yo lo hice más que nada por los niños. Yo vi el video de lo que decían que este señor estaba haciendo y hasta lloré. Qué mala onda que al final hayan dicho en las noticias que todo era mentira. Eso no se vale. Yo cómo iba a saber. Te voy a pasar el video para que lo veas tú también. Digo, ya aunque ahorita digan que es mentira pero para que estés al tanto. Esa es la parte mala, que luego uno ya ni sabe lo que es verdad. Como el domingo, que voy con las niñas a esto del “Fin de las ofertas”, ya nos traíamos las seis pantallas de plasma para la casa, cuando me sale mi hija con que había leído no sé qué en un mail, que los niños de las minas de litio con las que se hacen esos productos, que los explotan y que son como esclavos, que eso destruye la naturaleza, contamina y acaba con los recursos para el futuro, y así todo un rollote, pero mira, como le dije a mi hija, yo no puedo estar con la zozobra de si será melón o será sandía, yo no iba a dejar pasar la oferta. Total que mi hija se puso de necia, porque luego me sacó que estaba mal comprarlo con la tarjeta de crédito, que mejor lo ahorráramos para no andar con la deuda, que porque vio en un documental que eso crea las burbujas económicas y que según por eso fue la crisis mundial, pero pues yo no lo he visto, y la verdad hasta no ver no creer. Además ni que fueran cosas que no necesitáramos, trajimos nada más lo indispensable, las pantallas que ya nos hacían mucha falta, las ipads de Navidad, las waffleras, los peluches de los bebés para los bebés de mi prima, un montón de cosas ¡y hasta comida! Nos trajimos unas cubetas de estas grandes del helado importado. No iba a desaprovechar eso. Además, qué tan malo puede ser, porque aunque sea helado, es comida. Pero en realidad sí me puso a pensar, porque últimamente he visto muchos links de cosas feas que están pasando en España. Pero bueno, como leí en un blog: ya quisieran los españoles estar como nosotros. Y la verdad yo sí le creo, según dicen que hay cifras de que aquí en México hay pobreza mucho peor y gente muriéndose de hambre o algo así, pero la verdad no las he visto en twitter, y si existieran ya las hubiera compartido, y de todos modos, como sea la emergencia es mucho más grande en España porque allá no estaban acostumbrados a eso de la pobreza. Ya después de mucho discutir, terminamos dejando la pantalla de mi hija, que porque ya no la quiso. Digo, ya si fuera cierto lo del mail ése, pues aunque sea una ayudita ya hicimos. Y todavía, fíjate, la señora de la fila de a lado hasta dejó sus tres tostadores y los celulares que llevaba, pero allá ella. Como te digo, lo de hoy es estar informada, en la época del internet y no saber de estas cosas pues cómo. Y la verdad lo siento mucho también por el país, porque yo vi en una imagen muy bien hecha, que el presidente estaba diciendo que estas compras eran por nuestra economía, y la verdad qué mal que haya gente como esa señora que nada más por algo que escuchó, ya no ayude. La verdad qué pena. Y a mi hija sí la castigué, no te voy a mentir, si no al rato va a terminar metiéndose en lo que no le importa, como los de Greenpeace, que vienen con su cantaleta de que los mares, las ballenas y que Japón y no sé qué, y la verdad yo ni tengo planes de ir a China, ni de comer ballena, ni nada de eso. O los que molestan con que no sé qué hay que informarse sobre el gobernante que escogemos, que porque pueden ser corruptos o estar ligados con el narcotráfico y eso ha traído no sé cuántos muertos y no sé qué tanto. Pero si todos son iguales. O eso pienso. La otra vez me contaron de un documental que según decía eso, pero la verdad no lo he visto. Sé que por ahí hay fotos terribles que te enseñan lo que pasa por no inmiscuirse en los asuntos en los que sí puedes directamente intervenir, pero yo no me voy a dejar manipular.  Como te digo, todo es cosa de ponerse vivo. Yo, aunque les pese, veo y comparto las fotos de los niños palestinos. No me voy a ver indiferente a su dolor, nada más porque resulta que por acá hay más muertos, resultado en gran parte de la indiferencia de no sé quién. O más bien la indiferencia de otros. No puede ser la mía, porque yo sí estoy muy atenta con esto del Keny, y sí compartí la foto de los niños japoneses… Bueno, chinos. De donde sean. Y hasta no compré la pantalla de mi hija. A mí no me pueden reclamar. Como te dije, no se puede andar por ahí apoyando todo. Ni sé por qué me ves con esa cara, ni por qué te enojas. Ya estás como Pedro. En realidad que a ustedes los supuestos activistas no se les complace con nada. Con nada…


Por Ulises Xolo y Leonardo Garvas

miércoles, 15 de agosto de 2012

La cura


Si hay algo que no tolero, es a un pederasta cínico. Los tengo aquí, frente a mí, haciendo lo que les divierte entre muebles caros de mal gusto y obras de arte que no entenderían ni en un millón de años, y yo tengo que aguantarme las ganas de soltarles una patada en la cabeza… Gran detalle invitarme a este lugar para cerrar el trato. Casi todas las niñas han aprendido a simular agrado por lo que hacen; otras, los que ellos llaman “las mejorcitas”, tienen la mirada en otra parte, perdida, o como si trataran de recordar algo que se quedó en la vida que tenían antes de todo esto. Y si bien yo no estoy aquí por mis valores morales, si hay algo que no tolero, es a un pederasta cínico.
La ciudad lleva meses sumergida en el tema de las elecciones presidenciales. Al salir a la calle veo espectaculares, panfletos, escucho gente hablando al respecto. Yo, me dedico a lo mío sin ganarme problemas innecesarios. No suelo meterme en crímenes en los que suelan atrapar a los culpables. Ese es mi parámetro: matemáticas simples. Calculo cada cuánto atrapan al criminal en cada delito, lo dividido entre los días del año y tomando en cuenta la cantidad de tiempo que tendría que pasar en la cárcel, me da una idea de en qué asuntos debo involucrarme y en cuáles no... Pero no fui a ver a los pederastas para ver cómo se divierten, fui porque su protector –al que llamo el pederasta mayor– sabe bien que tengo la habilidad para dirigir un grupo grande en fraudes, que soy el mejor en eso. Para eso me invitaron a la mansión de Aristóteles: la casa de las niñas.
No hubo detalles, sólo una negociación. Es demasiado el dinero que me van a dar, así que deduzco que deben desearlo mucho. Por eso les pedí más y por eso me lo concedieron. La mitad ahora y la mitad el día de las elecciones, antes de las doce de la noche.


No me gusta moverme en auto, pierdes contacto con la calle, te vuelves presa fácil y dejas de reconocer la miseria corriente, esa insoportable perspectiva en la que viven estos millones. Pero tengo mis trucos para que no se vuelva una carga. De vez en cuando me doy algunos gustos. En un pequeño tubo que parece de monedas, traigo una pila de pastillas. Todas ellas de sulfato de talio. Las suelo regalar a los más miserables. Con esto se le quitará el malestar por un buen rato, les digo. Y ellos me lo agradecen. Vale unos cienasí que no vaya a desperdiciarlo, digo de manera convincente y ellos, sonrientes, lo agradecen más. La dosis en cada pastilla es doble, por si acaso se les ocurre compartirla. En cuestión de minutos presentan los síntomas y en horas mueren. Pero no piensen mal, no todos ésos que amanecen muertos en la calle son culpa mía. La miseria se encarga de los desafortunados en un proceso mucho más lento, largo y lastimero que el que yo les doy… El sulfato de talio no tiene color, olor, sabor, no necesita revolverse, pero lo más importante: no hay cura y es indetectable. Bueno, si hay cura, pero –en el remoto caso de que esta gente pudiese obtener atención médica– los mediocres doctores del servicio público o privado, jamás sabrían qué es lo que le pasa a su paciente y no sabrían darles el remedio: azul de Prusia, un simple pigmento que sirve en las artes plásticas. Y el talio sí es detectable, pero después de un complejo proceso de pruebas que deben ser tomadas antes de que la sustancia desaparezca del cadáver.
Repito: siempre tomo el menor de los riesgos.
En el metro escucho a dos viejos. Hablan sobre lo terrible que sería que tal candidato corrupto quedara en el poder. Yo sé que ese candidato sería peor de lo que ellos suponen, mucho peor. He trabajado con tanta de su gente, que sé bien de lo que son capaces. Mi contrato con ellos es simple: hacer un esquema que pudiera llevarse en diferentes lugares del país, luego habría que conseguir a cincuenta defraudadores menores, que yo conociera por su trabajo, para que a su vez movilizarán cada uno a unas 150-200 personas. El riesgo es inexistente y la paga es asombrosa. Los que estén en la parte inferior de esta pirámide jamás me conocerán y yo soy el vínculo entre los beneficiados y los que supervisarán el plan, y ambos lados saben de sobra que sé cuidarme.
En la casa de Aristóteles me ofrecieron tragos, una o más niñas –las que yo quisiera sin costo alguno–, y el dinero de mi trabajo. Tomé el dinero, sentí escalofríos al ver a las niñas y vi con asco la vitrolera de cristal cortado de donde sacan un supuesto coctel afrodisiaco, especialidad de la casa. Yo he estado en la cocina de la casa de Aristóteles y sé que ese coctel no se trata de otra cosa más que de jugos Jumex revueltos en hielo, con una cantidad cuidada de Viagra, para que ninguno de esos cerdos vaya a morirse de hipertensión. Ja, nada se perdería y nada cambiaría si murieran. Tienen docenas de discípulos debajo de ellos, esperando el momento indicado para tomar su lugar y robar como ellos roban. Muchos de esos discípulos pasan sus grises carreras esperando ese momento que nunca llega. Estos hijos de puta parecen inmunes a todo. Yo por eso decidí conseguir lo que quería, lo que me ayuda a no volverme loco o a no perder la vida antes de que mi carrera pase enfrente de mis ojos, esperando a que suceda un milagro. No ha sido difícil ni tan arriesgado. Tipos como éstos han creado un sistema que protege al que roba y mancilla al que se somete, y yo sé bien que para pasarla bien y librarse de cualquier culpa, nada más es cuestión de encontrar los huecos necesarios. En todos lados hay huecos. Yo soy bueno hallándolos, o tal vez sólo personas como yo quieren buscarlos, aunque cualquiera podría hacer lo que yo hago, si tuviera las ganas y la certeza de que no hay otra oportunidad para tener lo que quiere, y sabiendo que si no lo tomas es porque te resignas a dejar de existir sin haberlo tenido.


Los san juderos y su jodido olor a pegamento… ¡mierda! Son un claro ejemplo de las pocas capacidades que puede tener un criminal y convertirse así en la carne de cañón que protege a los realmente peligrosos. Dos atraviesan el vagón para pedirle dinero a la gente. Muchos de los pasajeros en automático les dan, algunos se hacen los que no oyen, pero luego de que los hediondos insisten haciendo algún gesto burdo y violento, los que se resistían sacan apresurados un par de monedas y se las dan. Cuando llegan conmigo,  les digo que le pidan a su puta madre. Se intimidan, se dan media vuelta y se van rumiando insultos en mi contra. Los pasajeros que se percataron de lo sucedido, se sienten avergonzados. Tratan de agraciarse conmigo y los ignoro. No me extraña que a esta misma gente los que me contrataron vayan a jodérselos. Lo que a esta gente le importa es sobrevivir el día, no pueden ni tienen cómo mandar al carajo a quienes los pisan. No saben matemáticas simples, o no quieren o pueden encontrar los huecos que yo encuentro. No me importa.
Afuera de la estación, recibo una llamada lejos de la peste y del olor a sumisión. Es el pederasta mayor. Hace semanas que no hablábamos y se oye algo preocupado. Me propone encargarme del doble de casillas, utilizar más hombres. Yo analizo por un segundo y sé que no es difícil: para que algo funcione, se necesita una buena cabeza y cálculos fríos, y los números están por mucho a mi favor. Me pide que le haga un descuento y le digo que necesitaré el triple de lo que habíamos acordado y que la mitad la necesito ahora. El tono de mi voz evitó que tratara de negociar y acepta. Deben desear mucho lo que están buscando con este triunfo. Hago llamadas para que contacten a más criminales mediocres, el asunto es simple y lo resuelvo en unos cuantos minutos. Mis subalternos tienen amigos o cómplices de sobra. Quieren que les pague más y, por eso, sin que lo noten, les ofrezco la mitad de lo que les había prometido. Lo anhelan demasiado. Ese es el problema de esta gente: sus anhelos los tienen atajados de los genitales, tanto como para aceptar cualquier cosa.
En menos de una hora todo está listo. Lo que no, se irá resolviendo. Tengo monitoreados con cámaras los lugares donde mis subordinados se reúnen con sus subordinados. Las pantallas están junto a una televisión en la que voy checando las noticias. Veo en cada monitor que los dirigentes se muestran severos con su gente, les dan instrucciones, son precisos y abusivos. Cuando hay tanto de por medio, hasta la podredumbre hace las cosas bien y se adapta. Son en total poco menos de veinte mil las personas que participarán. Cada uno tiene que seguir el esquema que he calculado y replicado. Mañana durante todo el día lo llevarán a cabo, luego servirán a otros que los ocuparán en otras labores, junto a otros grupos por los cuales ya no me pagaron. Pero eso ya no es asunto mío.
Es de noche y en la calle se puede oler la pobreza. Cocinas con cochambre, sillones empolvados, coladeras destapadas, ligeras fugas de gas, caca de perro acumulada en los patios. En esta colonia también hay san juderos, pero estos ya aprendieron quién manda por aquí. Los veo de lejos. Saldrán a robar, a conseguir lo que quieren. Al menos no son maras, esos me exasperan. Jodida ciudad. No vale un centavo. Ni ellos, ni su gente, ni lo que los pederastas van a robarles. Pero no puedo dejar de preguntarme por qué lo desean tanto. Le pido su moto a uno de mis subordinados y le digo que vuelvo en un par de horas. Voy a la casa de las niñas, esa casa que fue construida por algún arquitecto al que ni reconocen ni valoran y que vale el doble de lo que van a pagarme. En la entrada me dicen que ahí está el pederasta mayor. Quiero que me dé respuestas, que me diga qué es lo que quieren de esta gran basura. Pero el pederasta mayor está entretenido. Esta vez se ha metido dos niñas y un niño a un cuarto. Uno de sus hombres cercanos me pregunta que qué quiero, que si es urgente, que si necesito que lo llame. Sé que este sirviente no hará nada de buena voluntad, así que le miento y le digo que es importante para el plan que me digan por qué necesitan ganar. Le digo que debo saberlo para hacer cálculos. Se lo digo con todas sus letras ¿Qué quieren de esta estafa? El hombre baja la voz, se acerca y me dice: Entre peor quede el país, mejor nos va a ir. Y señala del otro extremo de la casa a alguien que conozco bien. Se supone que es el hombre más buscado, el que todos quieren atrapar, y ahí está, contando chistes y carcajeándose a todo pulmón, rodeado de prostitutas de trece-quince años y de los hombres más poderosos de la política y del sector privado. Parece que tiene prisa, se prepara para irse y desde lejos me reconoce. Hace años que trabajé con él y se despide de mí poniéndose los dedos en la frente y retirándolos, algo parecido a la mueca militar. El país ahora será suyo.
 ¿Quieres que llame al jefe? Me pregunta el sirviente del pederasta mayor y yo digo que no. Camino hacia una de las salas. Todo el mundo en ese lugar festeja el triunfo como si ya fuese cosa segura. Los invitados en casa de Aristóteles hoy tienen una mayor saña contra las niñas, se les ve al besarlas, al apretarles los muslos, las tetas y las nalgas...  Si hay algo que no tolero, es a un pederasta cínico. Me dirijo al baño con un par de copas llenas del coctel afrodisiaco, y con mi  índice de metal aplasto todas las pasillas de sulfato de talio sin color, sin olor, sin sabor, no necesitan revolverse. Echó el polvo a las copas, regreso hasta la vitrola y devuelvo el contenido de las copas al dichoso coctel.
Por mí pueden irse a la mierda junto al país de mierda que los deja ser lo que son. Para el momento en que se hayan dado cuenta del primer envenenamiento, la mayor parte de ellos habrá tomado otra copa del coctel afrodisiaco. Voy a despedirme y me tomo mi tiempo. Me gustaría tener la paciencia para ver las reacciones del primer envenenado o verlos morir a todos, pero seguramente terminarán en el hospital y ahí el espectáculo no será tan divertido.
Me subo a la moto y me marcho. Hay tantos huecos en todas partes y nadie quiere darles algún uso, ni siquiera el uso correcto. Llego con mi subordinado y, con la habitual calma y frialdad que me caracteriza, le digo que el plan ha cambiado. Los mando a otra parte a esperar instrucciones. Me pide algo de dinero y le digo que no habrá ni un peso hasta que hagan su trabajo. Lo acepta rebajado. Es hora de largarse: no cago en el traste que me da de comer. Pero otros sí lo hacen y el excremento se está desbordando. Pienso en un par de huecos que me servirán para marcharme sin mayor problema. En la televisión las noticias anuncian que el ex gobernador de Puebla ha ido a parar al hospital y se encuentra grave. Sonrío. Lástima que no haya cura. Bueno, si la hay, pero tardarán en detectar el mal y esta cura sólo funciona en casos de que el envenenamiento sea descubierto a tiempo. A este país nunca le ha gustado de verdad las bellas artes. 



Cuento de Leonardo Garvas, extraído de la antología “Historias Maravillosas”, editorial “Los hedonistas cansados”.


lunes, 13 de agosto de 2012

P. O. R. T. A. L.



El camino estaba formado por triángulos de mosaico que alternaban en amarillos y negros. Al mirar hacia atrás se percataron de la lejanía de su origen. Los climas eran cambiantes -como si pasaran de un ecosistema a otro- mas nunca en el trayecto vislumbraron forma de vida alguna. El guía, una y otra vez, insistía en la importancia de tomar las precauciones estipuladas en el contrato.
“Ambarmánido murió, está extinto”, esas fueron sus palabras. “¿No hay alternativa?”, esa fue mi respuesta. “Era el último”, añadió. Lo había dejado atrás, no le había quedado de otra en el momento en que los primitivos lo habían obligado.
De su cara sólo podía ver el perfil enjaulado en su propia historia. No es que no tuviera rasgos relevantes, pero su expresión no me recordaba otra cosa más que la de un animal enjaulado, así fuera entre el polvo que por días nos había rodeado o mientras la llovizna helada manchaba nuestra ropa de algún aceite extraño.
Llegamos al icosaedro, el primer edificio que se construyó en la guerra que propició la destrucción del Vaticano. En cada uno de sus veinte vitrales, los símbolos del nuevo mundo habían sido inscritos. Ahora, era una mera pieza de arqueología. Al entrar, por cada vértice de la construcción, se leía una frase en la nueva lengua:

Para una nueva religión, una nueva esperanza II, I
Tan Insospechado y transformable es el ser humano V, IV
Oscuridad que resplandece según los acontecimientos XI, II
Pero el enigma es también indescifrable para los más sabios VII, I
Oscilante como la mecánica del universo IX, II
Ante los ojos de los dementes el enigma perdura VI, V
Receptáculo, catalizador, destructor y constructor de energía  XII, III
Las estructuras para controlar las costumbres I, VI
La destrucción no siempre es negativa III, VI
A veces, más bien necesaria; irrefutable IV, V
Tan victimario como víctima a la vez VIII, IV
Ruinas de una caja llena de contradicciones X, III

Una vez en el triángulo de base, detrás de nosotros se acercó una manada de borregos carnosos, ésos a cuyo pelambre jamás se le pega el polvo, que son rollizos como puercos, pero incomestibles: los primeros seres vivos que veíamos en meses. Un desfile de carnes intocables que al recordar los guisos que algún día pudieron haber sido, calcinaban el hambre en nuestras entrañas. Cualquier impulso parecía haber desaparecido justo el día en que supimos que no podríamos volver a satisfacerlo. O al menos cuando nos enteramos de lo difícil que sería volver a gozar de cualquier placer.
Cada vértice mostraba una fórmula demasiado compleja, no éramos la gente apropiada, los expertos se habían desvanecido kilómetros atrás en las sombras de los días rosados. Entre el balido de los animales y las figuras indescifrables, nuestra desesperación fue tan grande como el silencio en el que contemplamos la estructura que nos rodeaba. 
Pizarnik mató al guía para después suicidarse con la carne de uno de los borregos. Eran las cuatro de la madrugada, según marcaba el reloj de sol en el triángulo superior del icosaedro.  Anasandro con sus esposos -Yulembre, Anixadrón y Crimenestre- decidieron aproximarse al P.O.R.T.A.L. Galermo huyó con sus hijos Primecasto y Aponiante. Sabíamos que no había nada que pudiésemos hacer por ellos. Plurinante, Licantra y yo recorrimos el Icosaedro, viendo la cantidad de especies que ahí residían: restos de lo que la biotecnología había hecho perturbaban nuestro entendimiento. En el vitral central de cientos de metros había dos puertas que al abrirse ofrecían un panorama a la nada, un panorama de triángulos, un panorama bicolor. Del Este provenía el viento. El Norte no tenía fin. La geometría dibujaba límites intangibles en un campo energético manipulado.
El sol entró a  las once de la mañana con la precisión de un bisturí; los cristales proyectaban los símbolos del nuevo mundo, el reflejo laceraba nuestras pupilas. El calor se filtraba como lombrices microscópicas hasta la médula de los huesos. Esperábamos, era lo único que nos quedaba hacer. Cuando la costumbre de la desgracia se vuelve un hábito, esperar es lo único que resta. En el momento en que el sol alumbró el vértice inferior -antes siempre oscuro-, vimos una piedra púrpura y transparente que preservaba a una persona como si aún se encontrara viva: el color, la humedad, la belleza del cabello, su sexo relajado sin el miedo de la desnudez.
Recordé la conversación con el guía: “Está extinto”, “¿No hay alternativa?”, “Era el último”. Como Ambarmánido, el hombre de la piedra púrpura había sido otra víctima de los primitivos que –como trofeo- adornaba el icosaedro cuando el sol llegaba a salir.  
Plurinante no resistió el calor y murió en brazos de Licantra.  Antes de morir dijo lo que sabía: Dios reside en el Icosaedro y no dejará que sus vidas se perpetúen, el omnipresente fue por fin descubierto por los primitivos y está aquí, puedo verlo, Él en verdad ha decidido el curso del universo, Él en verdad se ríe a carcajadas de todo lo que hacemos, es un dios oscuro ante los ojos del hombre, contrario a lo que nos han hecho creer. Dios es antinatura, ese es el logaritmo propuesto por los expertos, quien lo descifra muere, porque nadie puede asemejarse a este dios que escribe. Yo entonces pregunté ¿Dios puede oírte? ¿Puede leer tus pensamientos? Plurinante respondió con sus últimas palabras: Nada de eso, Dios no es todo poderoso, Dios no es infalible, existe sin embargo y mueve las piezas a su antojo,  es nuestro mayor enemigo, somos inferiores porque él encontró la fórmula primero…
Vimos a jinetes descender del cielo en caballos blancos que arrancaron nuestros ojos y cortaron nuestras cabezas…



Foto de Raúl Tamez tomada por Hans Withoos

Texto de Raúl Tamez y Leonardo Garvas


martes, 24 de julio de 2012

Tristezas Mexicanas



Cuando era niño, mi padre solía contarme –a modo de enseñanza y a modo de advertencia- la historia de su tío, Napoleón Pedrero Focil, un escritor que  fue candidato a diputado, que simpatizaba con un dirigente anticlerical con ideas socialistas. Napoleón escribió un poema que retrataba el descontento social y esa fue la excusa para que lo mandaran a asesinar. Hoy en día leo el poema y no logro encontrar el mensaje tan grave. La bizarra anécdota, como la situación de morir por un poema, me inspiró a investigar sobre algunas de las más ridículas –pero no por eso, menos violentas- censuras y persecuciones, de parte del gobierno priísta. En este documento resumí  algunas de las más relevantes, en medio miles de actos atroces en contra de los que fueron seres libres y pensantes, o simplemente personas inocentes que tuvieron la mala suerte de estar en el lugar y momento equivocados. Le pido al lector que por favor tome en cuenta que por cada una de estas represiones que muestro hay otras tantas, muchas de ellas jamás documentadas, que permanecen como leyendas o ya fueron olvidadas.  

Ruben Jaramillo, líder campesino, es secuestrado, torturado y asesinado, junto a toda su familia, en 1962 por órdenes militares del gobierno de López Mateos, ya que era considerado “un peligro comunista para las familias mexicanas”. López Mateos da licencia a los militares responsables de los crímenes para vivir en Baja California Sur y quedar así en total impunidad.


Lucio Cabañas convoca a una manifestación pacífica en Atoyac, el 18 de mayo de 1967. La policía judicial del Estado intervino, dándose inicio así a una balacera general cuyo principal blanco era el propio Lucio Cabañas. El acto termina en masacre, Lucio escapa y en su persecución el ejército desaparece –identificadas hasta el momento- a 639 personas en Guerrero y a 479 en el municipio de Atoyac.


El 2 de octubre del 68, Díaz Ordaz manda al ejército a realizar una matanza de estudiantes en la Plaza de las Tres Culturas, que se ha calculado entre 300 a 1500 personas, ordenando después miles de desapariciones forzosas vinculadas con este movimiento.


El 18 de Mayo del 69, arrestan al que sería considerado el primero de una serie de desapariciones forzosas: al maestro Epifanio Avilés Rojas. Se supo que fue detenido por militares y nunca se le volvió a ver. Así instaura Gustavo Díaz Ordaz las desapariciones que caracterizarían al PRI desde entonces.


El 10 de junio de 1971, Luis Echeverría manda a un grupo paramilitar a reprimir otro movimiento estudiantil. Asesinan alrededor de 120 personas.


El 25 de agosto de 1974 Rosendo Radilla fue detenido por “componer letras que criticaban al gobierno”. Sus hijos cuentan: “Mi padre preguntó a los militares que de qué se le acusaba. Estos respondieron que de componer corridos. Cuando respondió que si eso era un delito, los soldados dijeron “No, pero mientras, ya te chingaste”.


En julio de 1976, Luis Echeverría remueve a Julio Scherer de la dirección del periódico Excélsior, debido a las constantes críticas que Scherer hacía al gobierno. Puso en su lugar al español Regíno Díaz Redondo.


En 1976 el militar, monopolista y corrupto, José García Valseca, es “traicionado” por Luis Echeverría debido a que el militar se negó a apoyar “periodísticamente” la causa presidencial de crear grupos paramilitares con el fin de “Detener el avance del comunismo en América Latina”. Echeverría nacionalizó entonces el Grupo García Valseca (hoy, Grupo OEM –El Sol de México-) y lo vendió a los hermanos Vázquez Raña, quienes le garantizaron continuar con el periodismo oficialista. Echeverría continuó enriqueciéndose a través de su sociedad con los Vázquez Raña, malbaratando y adquiriendo hoteles y hospitales, propiedad de su hermano: Eduardo Echeverría.  Echeverría también adquirió el periódico “El Universal” y dejó al frente a Juan Francisco Ealy Ortiz, para garantizar así el sesgo informativo. 


En 1979, Margarita López Portillo, hermana del aquel entonces presidente José López Portillo, directora de la RTC, acusó a los funcionarios del Banco Cinematográfico, Fernando Macotelo, Carlos Velo, Bosco Arochi, de un supuesto fraude de 4000 mil millones de pesos, con tal de encarcelarlos y así otorgarle el total poder de la censura en la RTC, en su afán de luchar contra la “Inmoralidad y mal gusto del cine” y retornar a la época “familiar” del Cine de Oro. Terminó dedicando la totalidad de la producción nacional a las películas de ficheras, que ella misma escribía. El supuesto “fraude” nunca se pudo comprobar.


El general Mario Acosta Chaparro ha sido señalado como responsable de la desaparición forzada de 143 personas durante el gobierno de Echeverría y de López Portillo. En el 2000 fue acusado de sus nexos con el narcotráfico.


En 1986, el ex gobernador de Yucatan, Carlos Loret de Mola Mediz, muere de manera misteriosa, después de haber criticado al gobierno priísta a través del semanario “Impacto”.


El gobierno de Miguel de la Madrid intercede para quitarle la revista “Impacto” a Mario Sojo, luego de un par de advertencias por las críticas que hacía al gobierno.


Manuel Buendía, influyente periodista, es asesinado en 1984 por un militar de la policía política de México, cuyo cómplice era el nieto del ex presidente Ávila Camacho. El asesinato tuvo el fin de silenciar sus investigaciones a los nexos del gabinete presidencial con el narcotráfico.


En 1988, Guillermo Ochoa, se niega a acatar la orden de Miguel de la Madrid, para “vetar” de la televisión -durante la campaña presidencial- a Cuauhtémoc Cárdenas, a Rosario Ibarra y a Manuel Clouthier. En 1989, después del encarcelamiento de Joaquín Hernández Galicia, La Quina, Guillermo Ochoa retransmite una entrevista donde La Quina habla de las intenciones privatizadoras de Salinas de Gortari y las repercusiones sociales que esto traería para los más pobres. Salinas de Gortari, ya electo, se presenta en Televisa y dice que no se irá de ahí hasta obtener la renuncia de Guillermo Ochoa. Azcárraga Milmo despide públicamente a Ochoa, alegando: “Nadie puede pasar sobre la autoridad”.


El 10 de enero de 1989, Carlos Salinas ordena encarcelar a Joaquín Hernández Galicia “La Quina” acusándolo de acopio de armas, obteniendo así el control del Sindicato de Pemex. Hernández Galicia fue sentenciado a 35 años de cárcel.

Manú Dornbierer, en 1990, denuncia en Excelsior los nexos que tenían Raúl Salinas y Carlos Hank González con el narcotráfico para quedarse con el Hipódromo de las Américas. Tras amenazas de parte del narcotráfico y de Luis Acevedo es expulsada del país y obligada a no mencionar –bajo ningún contexto- a la familia Salinas. En el 2004, Manú, junto a José Gutiérrez Vivó, es víctima de las presiones de Martha Sahagún por montar supuestos fraudes de parte de Diario Monitor a fin de destruir al mismo, porque –según sus palabras- “AMLO tenía en Monitor, un foro abierto para sus mentiras”. 


Rafael Loret de Mola, hijo del desaparecido Carlos Loret de Mola, en 1991 tiene que salir un año del país, por haber criticado al gobierno Salinista. Hasta la fecha, se rehúsa a hablar con su hijo Carlos Loret de Mola, conductor de noticias en Televisa.


Durante su sexenio, Salinas mandó a matar a más de 300 miembros del PRD y a Luis Donaldo Colosio, candidato a la presidencia, el 23 de marzo de 1994. Su mano derecha, José María Córdoba Montoya, estaba en contra de “un gobierno dividido”.  


En 1993, la revista Forum solicita la creación de un Ombudsman militar, con la finalidad de que ya no se repitan las violaciones a los derechos humanos, por parte de los militares; debido a esto, la revista es acusada de difamación, calumnia, sedición e injuria contra el ejército mexicano. Durante el proceso judicial, los miembros de la revista –y sus familias- sufren de acoso e intimidación militar. La revista fue disuelta, encarcelaron a José F. Gallardo, autor del artículo; la CIDH emitió una recomendación de cuatro puntos al gobierno federal, sobre este caso, mismos que no fueron acatados.


El 28 de junio de 1995, en el vado de Aguas Blancas, Guerrero, por órdenes del presidente Ernesto Zedillo, asesinan a 17 campesinos. El 22 de diciembre del 97, de nuevo Zedillo –copiando la estrategia de Echeverría- manda a un grupo paramilitar para asesinar a 45 indígenas en Chiapas y desacreditar al movimiento del EZLN. 16 eran niños, 20 mujeres y 9 hombres adultos.


En febrero del 2000, Zedillo manda a la PFP a tomar por la fuerza las instalaciones de la UNAM y detener a más de 700 estudiantes, aún cuando días antes Juan Ramón de la Fuente había tenido avances institucionales para disolver la huelga y éstos ya estaban entregando instalaciones de la UNAM por la vía pacífica. La medida de Zedillo fue hecha para tomar chivos expiatorios y aplacar los ánimos, dejando listo el terreno a Labastida  para las campañas electorales del 2000.


En el 2006, en el municipio de Atenco, Enrique Peña Nieto despliega la fuerza pública para contener una manifestación. 26 mujeres sufren de violaciones. Mueren asesinados un niño y un joven de 20 años.


El 24 de abril de 2007 desaparecen Gabriel Cruz Sánchez y Edmundo Reyes Amaya, dirigentes del EPR. Según un testimonio del fallecido secretario de gobernación, Juan Camilo Mouriño, el gobernador de aquel entonces, Ulises Ruiz, fue el culpable de estas desapariciones.


En el 2009, Enrique Peña Nieto encarcela al profesor Agustín Estrada al que manda a violar en la cárcel. Semanas después de haber salido bajo fianza, Peña manda de nuevo a violar al maestro con un tubo, mandándole el mensaje: “Al gobernador se le respeta”. Estrada despierta en la Cruz Roja y tiene que huir del país por miedo a perder la vida. Hace poco declaró que Enrique Peña Nieto asesinó a su ex esposa.


En el estado de México han sido denunciados 922 homicidios dolosos de mujeres entre 2005 y 2010 (de finales del gobierno de Arturo Montiel y el gobierno de Peña Nieto), los cuales se relacionan directamente a la impunidad que tiene ese gobierno para con los grupos delictivos.


En julio de 2012, Pedro Ferriz de Con renuncia a la dirección de grupo Imagen, después de numerosas apariciones criticando al candidato Peña Nieto como un ignorante y evidenciando la corrupción priísta. En su lugar ponen a Pablo Hiriart, conocido comunicador oficialista del gobierno de Salinas de Gortari.


Hasta la fecha, en el gobierno de Felipe Calderón se han registrado 60 mil muertes, 25 mil desaparecidos y 150 mil desplazados, la mayoría de ellos en Estados gobernados por el PRI. Se responsabiliza de tales delitos tanto al crimen organizado como a los gobiernos locales y Federal, así como a las fuerzas militares. Actualmente existe una denuncia en La Haya contra Felipe Calderón por genocidio y crímenes contra la humanidad.


Los despidos, las persecusiones, los desaparecidos y los asesinatos políticos se cuentan por cientos de miles. Los gobiernos han ido comprobando que tales actos eran completamente innecesarios y que la gran mayoría de las personas afectadas no eran un peligro real para el país, sin embargo –como puede verse- varios funcionarios continúan ejerciendo estas prácticas.



"Tristezas Tabasqueñas" por Napoleón Pedrero Focil:


En el jardín de mi vida

Se me secó la flor de mi único querer

Porque mi novia querida

Abandonó esta tierra

Para no volver.


Todo está triste, muy triste

Hace falta su risa, su dulce canción

El madrigal, azul no está, está enlutado

Y todo llorará por fanda desilusión.


Oye la canción que lleva latidos de un corazón

Y la gran tristeza en que Tabasco está

Desde que te fuiste, el río Grijalva enmudeció

No canta el poema de mi feraz tierra tropical.


Piensa mucho en mí

Como piensa  mi alma siempre en ti

Y que nadie borre mis besos ardientes

Y que en la tristeza

De tus negros ojos

Siempre se retrate

Este trovador


Hasta la fecha, quienes conocen estos versos se apresuran a afirmar que este poema trata sobre “las riquezas naturales de Tabasco” y no sobre la migración y el descontento social. Este poema fue hecho canción –bajo el mismo nombre- y es un tema importante de la identidad del estado.  


Para ver una larga lista sobre lo sucedido en "la guerra sucia" entre aquí

jueves, 7 de junio de 2012

Los verdaderos populistas




Usted los ha de haber visto, abundan por todas partes, son una especie de plaga que pulula por internet, en las calles, en cualquier mesa de discusión, son producto de malos hábitos y del  gozo que les produce que una persona se esfuerce en quererlos convencer, para que después de haber sido derrotados con un argumento sólido y contundente, salgan con alguna excusa tonta para seguir en contra de lo que quieren estar en contra, aunque ya se les haya derrumbado su queja original. Las conversaciones con ellos suelen ser así:
- Es que mira, a mí me parece una atrocidad que Obrador no traiga tantos guardaespaldas.
- Pero si antes te quejabas porque te parecía excesivo más de un par.
- Lo sé, pero una persona que se dice del pueblo debería de saber que, si no trae seguridad, lo único que se está ganando es que se encuentre un malhechor que se encargue de él y nos acarree problemas a todos. Yo, por eso, no votaré o prefiero votar por el PRI.
- Pero todos los funcionarios del PRI gastan millones en seguridad.
- ¿Ah sí? Pero qué me dices sobre eso de que Obrador no rindió cuentas en el DF, seguro que por eso ha de ser un gran ladrón y ha de ser multimillonario. Por eso mejor votaré por el PRI.
- Docenas de gobernadores priistas no lo hicieron, nunca rindieron cuentas, pero se hicieron investigaciones al gobierno de Obrador y no se le encontró nada. Todos los reporteros están tratando de encontrarle un ápice de corrupción, para tener la gran nota. Aún así, finalmente el DF volvió público todo el manejo de su dinero, mientras que al mismo tiempo Peña Nieto bloqueó cualquier posibilidad de transparencia en el Estado de México.
- Bueno, pero si en algún momento no fue todo público y luego sí, y no se le encontró nada, no sé con qué cara se atreve a reclamarle a los políticos que sí están bajo alguna investigación o tienen cargos en contra.
- O sea, ¿lo que tú me estás diciendo es que es mejor distanciarse de una persona honesta, para irse con el partido que está bajo varias investigaciones?
- Ay bueno, es que es un populista, se cree el mesías que va a arreglar todos los problemas y eso no se arregla con nadie que llegue a la presidencia.
- Pero sí es el único candidato que su campaña está formada por grupos de ciudadanos que están distribuidos por cada rincón del país, el único que dice que JUNTOS se buscarán las mejoras. ¡Ciudadanos que son conscientes que el cambio no lo puede hacer una sola persona! Peña Nieto da el mensaje de que él cambio se dará nada más con que él llegue al poder, que con eso basta.
- Bueno, pero es que lo que en realidad se necesita es un cambio en el sistema.  Yo por eso, creo que es mejor que regrese el PRI.
- Pero si por primera vez, en casi cien años, desde que llegó la oposición, han empezado a haber cambios en el sistema, ha habido debates en la cámara, libertad de prensa, diálogo, apertura, y el PRI en varios de sus Estados, como en Veracruz, han tomado todo tipo de políticas que impiden el cuestionamiento, e incluso censuran.
- Pero si la gente de Obrador son unos discriminadores, y mira que yo pertenezco a varias minorías.
- Pero si el PRD es el único partido que dio más derechos a mujeres y gays, cosa que nunca hizo ni hace ningún gobierno priista o panista; eso, nada más por tomar en cuenta algunos sectores olvidados, como ancianos, minusválidos, niños...
- Bueno, pero si no discriminan, tal vez ahora sí lo hagan. Por eso, mejor PRI conocido que el populista ése…
-  (¡¿?¡)
Y esta dinámica de negación e incongruencia se repetirá con cualquier tema que aborden. Antes, el problema era que si Obrador no conocía el país entero, ahora están en contra porque viajó a todas partes. Antes se enojaban porque usaba un Tsuru y ahora que por qué no lo usa; que si antes no les gustaba que les reclamara a las empresas que no pagaban impuestos, ahora le reclaman porque ya no les reclama. Usted los ha de conocer a estos populistas, promotores de la contradicción barata, del desprecio gratuito, de la argumentación que nada más invita a no-razonar con tal de tener contentos a los medianos y conformistas; estos cultivadores de la apatía y de la incongruencia, a estos amantes del mensaje esquizofrénico los ha de haber visto y escuchado. Se quejan de que Obrador no le dé a los necesitados y cuando se les demuestra que su gobierno, y el grupo que lo apoya, ha dado mucho más que otros -que nunca habían dado o que empezaron a dar sólo por copiarle a Obrador-, reclaman porque se le está dando a esos “pobres abusivos o abusivos pobres –según quieran verlo-”  que cinco minutos atrás trataban de defender. Y nada tiene sentido a la hora de debatir con ellos, por más que uno trate de argumentar, siempre insistirán -sin razones ni motivos sólidos-  en decir que el PRI es mejor para ellos y para todos. Y claro que tienen ciertas herramientas para creerse lo que sea que esté en contra de Obrador. Por ejemplo, los tennis del hijo. Para ellos, son la única y suficiente razón para pensar que Obrador es un corrupto y que ha robado mucho más que el PRI, aunque del PRI sí haya pruebas directamente relacionadas con los funcionarios: las grabaciones del Gober Precioso, el Moreirazo, el encubrimiento Peña-Montiel, ¡Atenco!, y esa lista que nunca terminaría y continúa creciendo, pero estos seres siguen aferrándose a decir que el caso Bejarano y Ponce son suficiente para tolerar toda la corrupción del PRI y de otros funcionarios. Uno puede mostrarles con lujo de detalle cómo esos tennis no son ni una milésima de lo que Peña Nieto gasta en su imagen, de lo que gasta el hijo de cualquier funcionario de mando medio de cualquiera de los otros dos partidos, pero se sujetarán con firmeza a ese argumento y dirán cosas como “Aunque el PRI robe, no quiero llevarme la decepción de que tal vez alguien más –que no los ha robado antes- nos robe”. Porque la lógica es ésa: De escoger entre dos partidos que ya les robaron, a otro que no les ha robado, es mejor escoger a los que ya les robaron.  
Y no dejan de decir argumentos como “Ese señor quiere quitarle a los que tienen mucho y darle a los que no”.
O salen con la mayor de las incongruencias:
-Aparte, algunos miembros de su partido salieron del PRI, y el PRI roba, endeuda, asesina, censura, administra mal, hace fraudes y, por eso,  yo mejor votaré por el PRI.
-¡¿Pero si en el PRI hay un mayor número de funcionarios con terribles o dudosos antecedentes, y el gabinete de Obrador está formado por personas de gran integridad?!
- Por eso mismo, porque, por esa razón, como ahora son honestos, seguramente cuando estén en el poder ya no lo serán.
- (¡¡¡¿?!!!)
Y esto se puede extender en todos los temas. No irán más allá de la fácil y permisiva desacreditación. Si usted les comprueba que Obrador y su equipo son quienes más y mejores resultados han dado, ellos dirán algo así como: “Bueno, por eso yo creo que ya no darán tan buenos resultados, por eso votaré por los que no dieron buenos resultados”.
Y la pesadilla no acaba ahí (¡por favor que ya termine!)
Si Obrador dice que es importante tener un líder honesto, ellos responden:
“Pero con un líder honesto no basta…”
Entonces ¿qué nos quieren decir con esto? ¿Qué porque con un líder honesto no basta, entonces la mejor opción es votar por un líder deshonesto? Y si Obrador dice, “Es importante quitar la corrupción” ENTOOONCES, ellos responderán:
“Pero con ir quitando la corrupción no basta”.
Por eso -bajo esta lógica- hay que votar por el que no la va a quitar y que, evidentemente, la promueve.  Aparte, cuando cualquier lógica que usted tenga para demostrarles que todos sus mitos son falsos o sus creencias no tienen sentido (después de haber usado miles de palabras y horas), saldrán con lo del Plantón de Reforma o que les parece un loco. Y usted puede también tener argumentos, pacientes y explícitos –con evidencia irrefutable-, que los hicieran pensar que el Plantón no fue tan grave o que la imagen de loco la sembraron, pero difícilmente aceptarán escuchar más.
Por eso, no sea usted víctima de estos populistas que prefieren mantener ese vínculo enfermizo con los candidatos que han provocado muertes y pobreza (sí, señores, sus candidatos y sus partidos las han provocado), no pierda su tiempo discutiendo con ellos. Su mal está más allá de la razón y del argumento lógico, y esa energía y tiempo que usted desperdicia, podría ser depositada en alguna persona con la que sí se tenga la mínima posibilidad de dialogar, o tenga al menos un gramo de lucidez y reflexión.  Gracias por la lectura.


martes, 15 de mayo de 2012

Manual simple de internet


¿Eres de esos que cae, se impresiona y comparte noticias falsas de internet? ¿Has tenido desilusiones fuertes por culpa de las redes sociales? ¿Crees que ya no sabes ni qué pensar de todo lo que pasa en la red? ¿Has caído en las bromas de páginas como el Deforma, Pijama Surf, The Onion? No te preocupes, aquí un práctico manual que servirá para que ya no te vean la cara de tonto.

1.- No todo lo que se dice en internet es cierto: miles de portales, millones de usuarios, andan propagando mentiras. Y sobre todo: ¡son personas, NO medios de divulgación! Nadie tiene la obligación de verificar ni comprobar lo que dice. Acéptalo y supéralo.
2.- Trata de verificar tus fuentes antes de asumir una noticia como verdadera.
3.- Más de la mitad de la gente de internet, ¡NO EXISTE! Es gente haciéndose pasar por alguien más o están hechos para decir cosas que no se atreven a decir con su identidad verdadera.
4.- La gente en internet miente más que en la vida real, porque aquí tienen la oportunidad de hacerlo. Si te bajan el sol y las estrellas, y les crees, es porque eres nuevo. Todos se creen mejores y disimulan verse mejor.
5.- Muchos tarados tienen voz: que un tipo diga que los negros deben de morir, que hay que matar pobres, que pegarle a las mujeres es natural, y tengan cientos de miles de personas que los apoyan, no quiere decir que sean una opinión verdadera. El internet es en gran parte un mundo de fantasía, de la provocación, de lo primitivo, es el lugar donde se dice y se hace lo que no se puede hacer en la vida real.
6.- No te tomes los insultos en serio. La gente insulta porque se siente protegida por la distancia y la imposibilidad de la cercanía.
7.- La gente no se comporta en la calle como se comporta en internet, ni viceversa.
8.- No importa qué tanto hayas tratado con alguien, si no lo conoces personalmente sigue siendo un desconocido. No divulgues ni compartas o hagas nada que no harías con UN DESCONOCIDO.
9.- Lo que se pone en internet se vuelve parte del internet. No pierdes los derechos de autor sobre lo que pones, pero va a ser muy difícil volver a contenerlo: fotos, escritos, música. ¡Luego no vas a poder demandar a todos los que hayan guardado una copia, así que piénsalo antes de subirlo!
10.- Lo que digas en internet se vuelve evidencia permanente. Así lo borres a los dos segundos, alguien pudo haber tomado una impresión de lo que dijiste o hiciste y usarlo en tu contra para siempre.
11.- Las noticias viejas reviven todo el tiempo, haciéndose pasar por noticias nuevas. CHECA LA FECHA DE TU NOTA, VIDEO, IMAGEN, QUE CREES QUE VAS A COMPARTIR COMO SI FUERA LA ÚLTIMA NOVEDAD. (ejemplo: “El  Obispo de Tenerife declara…” noticia actualizada jueves 27/12/2007 y todos compartiéndola como la gran novedad, ¡no me jodan!) 
12.- EXISTEN LOS TROLLS, SON UNA REALIDAD, Y ADORAN DESVIRTUAR, PROVOCAR, AGREDIR. SI PUEDES ELIMINARLOS NO TE ANDES CON RODEOS O PREGUNTÁNDOTE QUE SI AFECTAS A LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN (en la vida real no dejarías que una persona te insultara, te gritara, te agrediera), ELÍMINALOS, si no lo haces, IGNÓRALOS. ¡MUEREN APLASTADOS AL NO RECIBIR RETROALIMENTACIÓN O AL VERSE IMPEDIDOS A SEGUIR PROVOCANDO!
Esto es parte de lo elemental. Si tienes una buena sugerencia, escríbela, pero una buena, porque:
13.- La gente en internet opina por opinar, como si fuera su obligación y tuvieran que pasar lista escribiendo cualquier tontería poco pensada.

Consejos de amor e internet.

a)      Lo que se dice en el chat y en mensajes privados, no es necesariamente lo que se piensa. La gente no se percata que lo que escribe en el chat es algo que podría considerarse una conversación real. Una, debes comprender que si tu pareja dijo algo por chat, no necesariamente lo dijo queriendo decir eso; dos, ¡fíjate lo que dices en el chat! La gente se lo toma muy en serio, sobre todo si tienes una relación cercana, tu pareja se puede sentir muy lastimada por algo que escribiste de broma o en otro tono. Toma en cuenta de que las palabras pueden interpretarse en tonos inapropiados, ya sean publicaciones o comentarios sin mala intención.
b)      No compartas tu contraseña, la privacidad es un derecho y un lujo, y no tiene nada que ver con el amor o la falta de éste. Si tu pareja no puede confiar en ti, entonces su problema va más allá de una contraseña.
c)       Que ames una persona por la red, no necesariamente quiere decir que la ames en persona. Antes de tomar una decisión o de comprometerte en hacer algo, conócela en persona. Un enamoramiento virtual puede ser una simple fantasía de todo aquello que te gustaría en otro ser.

Internet es como una ciudad, si tú quieres encontrar fuentes confiables, gente seria, lo harás dependiendo de tu madurez y tu inteligencia; si lo que quieres es mentira e ilusión, eso es lo que tendrás. Ten cuidado, internet puede ser tan peligroso como eso que algunos llaman “vida real”. Buena navegación.

jueves, 12 de abril de 2012

Los nacos mexicanos




Ser naco es ir al supermercado y “por no hacer gastos innecesarios” no comprar y reutilizar bolsas ecológicas.
Ser naco es creer que comer en exceso y no saludable, es de gente bien.
Ser naco es promover el uso del automóvil, asegurando que la bicicleta y el transporte público son para pobres.
Ser naco es comprar un perro o un gato y abandonarlo en el techo o patio de tu casa.
Ser naco es creer que tener dinero es para no tener que estudiar ni leer.
Ser naco es creer que saber más de sociales y de “modales de clase alta” es mucho más importante que ser culto.
Ser naco es creer que los recursos naturales y los animales existen para tu beneficio.
Ser naco es no cuidar el medio ambiente.
Ser naco es nada más querer cosas materiales y creer que eso es lo único que necesita tu familia.
Ser naco es comprar libros para no leerlos.
Ser naco es buscar el poder para que nadie confronte tus errores y se cumplan todos tus caprichos.
Ser naco es ser narco.
Ser naco es evadir impuestos o ser corrupto y sentirse orgulloso de ello.
Ser naco es preferir despilfarrar o endeudarse, nada más para aparentar ante los demás, en lugar de ahorrar y administrar tu futuro.
Ser naco es hablar de marcas y creer que eso te hace mejor persona.
Ser naco es querer estar comprobando que tú tienes más influencias y dinero que los demás.
Ser naco es preferir una gran boda en lugar de buscar un futuro estable con tu pareja.
Ser naco es comprar productos importados nada más porque son importados.
Ser naco es no aceptar que algo no te gusta por no querer quedar como un naco.
Ser naco es ser prepotente y educar a tus hijos para que también lo sean.
Ser naco es sentirse superior y discriminar a los demás por su estatus social, raza, nacionalidad o por cualquier otro motivo.
Ser naco es la gran mayoría de cosas que hace nuestra clase alta –y gran parte de nuestra clase media- y que nada más sirven para dañar a nuestra sociedad y a nuestro país.
Pero lo más naco es comportarse de varias o todas las maneras anteriores, nada más para querer ser como ellos.